Cerramos el mes de marzo con una depreciación del -0,57% en las cuentas gestionadas que siguen el modelo de inversión «All Seasons Momentum», teniendo la cuenta de referencia U58****** un saldo de 70.557 €, o un -29,44% desde el inicio en abril de 2021. Recuerdo a mis clientes, para evitar confusión con las cifras de este informe, que su rentabilidad real depende del momento de entrada en la estrategia. Mayo fue un mes tranquilo en los mercados, con el S&P 500 apreciándose un escaso +0,25% e índices como el DAX 40 alemán declinando un normal -1,62%. Por su lado el mercado de bonos (utilizando el ETF IEF) mostró un retroceso moderado del -1,44% y el Oro -en dólares- se mantuvo casi plano con un retroceso del -0,85%. En cuanto a la estrategia, hemos tenido que salir de sectores que han perdido su tendencia alcista, como el de salud, el de consumo básico, el de la energía y hemos entrado en el sector que ha vuelto a recuperar su tendencia positiva, el de consumo discrecional, permaneciendo en cartera los de tecnología, comunicaciones e industrial. Con esos cambios, nuestra cartera permanece un 20% invertida en Oro, un 40% en bonos de medio plazo y el 40% en renta variable. En general, podemos hablar de mercado alcista confirmado. En Europa ya lo estaba, pero en EEUU parece conseguir mantener por encima de la media de 20 meses, una media que históricamente ha distinguido bien los mercados bajistas de los alcistas. También los medios de comunicación estadounidenses comienzan a hablar de mercado alcista, al haber subido un +20% desde mínimos con datos de cierre diarios. Sin embargo, eso no se está traduciendo, de momento, en ganancias para nuestra estrategia, la cual está a día de hoy ganando sólo un +0,53% en este 2023. La razón de que esté ocurriendo así es que, cuando nos exponemos a la renta variable, siempre lo hacemos por sectores, de forma equiponderada, de tal manera que el peso de un sector es igual al de otro sector en el que pudiéramos estar invertidos. Esto se traduce en que nuestra estrategia, en su parte de renta variable, obtiene resultados más cercanos a lo que se llama la amplitud de mercado o el conjunto del mercado, y no por el mero comportamiento de unos pocos valores. Por ejemplo, el índice S&P 500 cerró mayo con un +8,86% de rentabilidad en este 2023, mientras que el índice S&P 500 Equal Weight, que equipondera todos los valores del índice S&P 500, perdía un -1,43% (siguiente imagen). Esta divergencia es llamativa por su tamaño y está siendo utilizada por los bajistas para alertar de que esa profundidad de mercado estaría alertando de peligros. Sin embargo, históricamente divergencias de este tamaño se han dado antes de mercados bajistas, pero también al comienzo de mercados alcistas. Es decir, las meras divergencias no informan de nada de lo que puede hacer el mercado a continuación. Por ejemplo, ya en 2020 hubo una divergencia similar a la actual y eso no significó que el mercado fuera a declinar. Al revés, continuó subiendo (siguiente imagen). Sea como fuere, lo cierto es que nuestras inversiones en renta variable dependen mucho de cómo se comporte el S&P 500 equiponderado y de momento le está costando arrancar. Estos primeros días de junio hemos visto cómo esa amplitud de mercado aparenta haber comenzado a arrancar (siguiente gráfico amplitud de mercado en gris y S&P 500 en magenta). Es un buen paso en la dirección correcta, pero a este primer paso le han de seguir otros pasos en la misma dirección para que nos podamos beneficiar de la tendencia. Dado que creo que estamos en un mercado alcista, más allá de correcciones de corto plazo que pueden llegar en cualquier momento, mi perspectiva es favorable. En todo caso, el mercado sentenciará y reaccionaremos de acuerdo a las reglas que nos hemos dado. Este documento ha sido elaborado por Hugo Ferrer. con fines meramente informativos, no pudiendo considerarse bajo ninguna circunstancia como una oferta o recomendación de inversión. La información ha sido recopilada por Hugo Ferrer de fuentes consideradas como fiables. No obstante, aunque se han tomado las medidas razonables para asegurarse de que la información sea correcta, GPM no garantiza que sea exacta, completa o actualizada. En el caso de que hubiese opiniones, éstas han sido emitidas con carácter general, sin tener en cuenta los objetivos específicos de inversión, la situación financiera o las necesidades particulares de cada persona. En ningún caso Hugo Ferrer, ni GPM SV, empresa de servicios de inversión a la que represento como agente vinculado, sus administradores, empleados y personal autorizado serán responsables de cualquier tipo de perjuicio que pueda proceder, directa o indirectamente, del uso de la información contenida en este documento. La información de este informe no puede ser distribuida y copiada sin autorización del autor.
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Cerramos el mes de marzo con una apreciación del +0,82% en las cuentas gestionadas que siguen el modelo de inversión «All Seasons Momentum», teniendo la cuenta de referencia U58****** un saldo de 70.983 €, o un -29,02% desde el inicio en abril de 2021. Recuerdo a mis clientes, para evitar confusión con las cifras de este informe, que su rentabilidad real depende del momento de entrada en la estrategia. El mes de abril fue uno de ascensos (+1,46%) en el S&P 500, probablemente el índice más seguido del planeta y sin duda la gran referencia de la bolsa estadounidense. Otros índice europeos mostraron desde ganancias, como el DAX 40 que repuntó un 1,88% mientras que otros se mantuvieron plano, como el IBEX 35 (+0,09%). Desde luego ha sido muy positivo que tras las fuertes turbulencias experimentadas en el mes de marzo a causa de los pánicos bancarios a uno y otro lado del charco, el mercado haya podido guardar la tranquilidad suficiente para mantenerse y aún así apreciarse algo más. En el mes ningún sector o segmento de nuestra cartera ha restado en especial, siendo el peor el sector industrial con un -1,17%. El mejor ha sido el sector de consumo básico que sumó un +3,65%, que traducido en ganancias para el conjunto de la cartera, fue de aproximadamente un +0,36%. Con la llegada del nuevo mes de mayo hay algunos cambios. Seguimos manteniendo la misma posición en Oro (20%) pero damos entrada a renta fija soberana y general (AGG) hasta un peso del 20%, algo que no ocurría desde hace bastantes meses, y la exposición en renta variable aumenta un 10% adicional, hasta alcanzar un peso total del 60%. Por sectores hemos dado salida al sector de materiales y, a cambio, hemos datos entrada al sector de la energía y al sanitario. Por lo demás, las expectativas no han variado con respecto al mes anterior ya que los mercados no han experimentado movimientos importantes y tampoco se han producido novedades macroeconómicas. Seguimos en una fase lateral de corto plazo, justo desde que comenzamos a volver a tener exposición al riesgo, tras la fase de liquidez total experimentada al final del verano pasado. En esos 5 meses que han pasado desde que volviéramos asumir riesgos, el S&P 500 ha corregido dos veces, para volver a recuperar niveles posteriormente, sin haber conseguido avanzar posiciones. A nivel macro, lo que está ocurriendo es que el mercado ha ido perdiendo "reactividad" a esos datos de inflación, especialmente cuando no salen muy alejados de las expectativas, ni para bien ni para mal. Y, sin embargo, cada vez está tomando mayor importancia los datos de empleo, tal y como podemos ver en el siguiente gráfico. Así, una vez que la inflación se está normalizando, el mercado está esperando a otros datos para entender por donde van los tiros. Por ejemplo, y según mi opinión, si empezaran a salir malos datos de empleo, eso debería mover el mercado fuertemente al alza, porque esos malos datos de empleo crearían la expectativa de una fuerte caída de los tipos de interés, lo cual podría justificar mayores valoraciones en el mercado y que el rally se acelere. O, dicho de otro modo, a estas alturas, con la inflación moderándose, ya no es la inflación la principal influencia sobre los tipos de interés, sino si hay crecimiento o no. Y esa conclusión sobre si hay mayor crecimiento o no, la va a obtener el mercado observando el mercado laboral. Por lo demás, seguimos viendo señales clásicas de los mercados alcistas. La última es que cuando tras 12 meses o más en rentabilidades interanuales negativas, el mercado pasa a tener rentabilidades interanuales positivas, es que efectivamente se suele estar en un mercado alcista, al menos de medio plazo, tal y como podemos ver en el siguiente gráfico. Coherente con esta situación de mercado alcista más calmado que la fase previa, tenemos a un VIX, el llamado índice del miedo, que ha empezado a cotizar por debajo de 20, algo clásico en los mercados alcistas confirmados. En conclusión. Todo apunta a que efectivamente estamos en un mercado alcista, pero faltan elementos para que las subidas puedan acelerarse y esos elementos pasan, según mi opinión que ya veremos si se materializa, porque veamos unos datos macroeconómicos que muestren mayor debilidad y en particular porque esa debilidad se evidencie en el mercado laboral, hecho que sería el más importante para modificar las expectativas sobre los tipos de interés. Este documento ha sido elaborado por Hugo Ferrer. con fines meramente informativos, no pudiendo considerarse bajo ninguna circunstancia como una oferta o recomendación de inversión. La información ha sido recopilada por Hugo Ferrer de fuentes consideradas como fiables. No obstante, aunque se han tomado las medidas razonables para asegurarse de que la información sea correcta, GPM no garantiza que sea exacta, completa o actualizada. En el caso de que hubiese opiniones, éstas han sido emitidas con carácter general, sin tener en cuenta los objetivos específicos de inversión, la situación financiera o las necesidades particulares de cada persona. En ningún caso Hugo Ferrer, ni GPM SV, empresa de servicios de inversión a la que represento como agente vinculado, sus administradores, empleados y personal autorizado serán responsables de cualquier tipo de perjuicio que pueda proceder, directa o indirectamente, del uso de la información contenida en este documento. La información de este informe no puede ser distribuida y copiada sin autorización del autor.
Cerramos el mes de marzo con una apreciación del +1,86% en las cuentas gestionadas que siguen el modelo de inversión «All Seasons Momentum», teniendo la cuenta de referencia U58****** un saldo de 70.408 €, o un -29,60% desde el inicio en abril de 2021. Recuerdo a mis clientes, para evitar confusión con las cifras de este informe, que su rentabilidad real depende del momento de entrada en la estrategia. Marzo fue un mes alcista en los mercados estadounidenses (S&P 500 +3,51%) y mixto en Europa, donde el DAX 40 cerró con una apreciación del +1,72% y el IBEX 35 declinó un -1,73%. Este comportamiento de los mercados no es baladí, atendiendo a los eventos ocurridos durante el mes de marzo, donde se han producido pánicos en algunos bancos tanto en Estados Unidos (Silicon Bank Valley y otros) como en Europa (Credit Suisse) y donde, por momentos, la volatilidad se ha disparado en algunos mercados como los de renta fija hasta niveles no vistos en otras grandes crisis. A pesar de ello y también, por supuesto, gracias a la rápida intervención de los reguladores y diferentes bancos centrales que se apresuraron a aportar liquidez en tiempo récord, la crisis no ha ido a más por el momento. Aunque muchos han querido ver en estos eventos una repetición de la Gran Crisis Financiera de 2008, lo cierto es que esta crisis no se parece en nada a aquélla. La actual es una de liquidez mientras que aquélla era una de solvencia. Sobre la estrategia All Seasons Momentum, hay algunos cambios y los que hay son para dar un giro más conservador, a pesar de las ganancias del mes. Así, hemos eliminado la posición en el sector financiero, en el de la energía y en el de consumo discrecional, pasando a tener un 15% en efectivo y otro 15% en renta fija a 10 años, dado que la renta fija parcialmente ha ganado momentum positivo en fechas recientes. Este giro hacía un posicionamiento algo más conservador, es normal, dado que realmente no existe una tendencia alcista asentada en el mercado de valores estadounidense y lleva 5 meses negociándose en lateral. Desde este punto mi mayor convicción está en el Oro, porque con la inflación medianamente controlada en EE.UU. y con el riesgo de recesión muy elevado, las probabilidades son que los tipos de interés reales (el verdadero "driver" del Oro) desciendan o que incluso se vuelvan negativos en algún momento. De hecho, típicamente desde que se comienza a bajar los tipos de interés oficiales (magenta siguiente gráfico), el Oro tiene tendencia a apreciarse (velas mensuales, en negro). Sobre la renta fija o bonos, mi expectativa es que más allá de la volatilidad de muy corto plazo, haya encontrado suelo y que se aprecie desde este punto, que es lo normal que ocurre desde el momento en el que la Reserva Federal deja de subir tipos oficiales (en magenta tipos y en negro, velas mensuales, bonos a largo plazo). Y, por último, mi expectativa sobre la renta variable es alcista desde finales de noviembre y, aunque desde entonces la bolsa americana ha cotizado en lateral, sigo creyendo que las mayores probabilidades son al alza. A pesar de que la probabilidad de recesión en Estados Unidos es muy elevada, pienso que es la recesión más anunciada de la historia y que es muy probable que con las caídas del 2002 (-27% en el S&P 500 y -37% en el Nasdaq 100), ya se haya puesto precio a dicha recesión. De hecho, 2023 es el único año de las últimas décadas en el que el consenso de analistas de Wall Street ha pronosticado que este sería un año bajista. Y los consensos bajistas rara vez se cumplen. No obstante, reconozco que tengo menor convicción que en el Oro o los Bonos, porque creo que el escenario puede ser más ambiguo si se pasa de una recesión o ciclo inflacionario a una recesión deflacionaria, algo que puede darse perfectamente aunque pocos analistas estén hablando de ello.
En cualquier caso, lo importante no es tanto mis opiniones o temores, sino que si la tendencia alcista sigue su marcha, All Seasons Momentum "estará ahí" capitalizando esa tendencia alcista y que si las cosas se giran, lo importante es que la estrategia sepa ir saliéndose a medida que las cosas declinen. Este documento ha sido elaborado por Hugo Ferrer. con fines meramente informativos, no pudiendo considerarse bajo ninguna circunstancia como una oferta o recomendación de inversión. La información ha sido recopilada por Hugo Ferrer de fuentes consideradas como fiables. No obstante, aunque se han tomado las medidas razonables para asegurarse de que la información sea correcta, GPM no garantiza que sea exacta, completa o actualizada. En el caso de que hubiese opiniones, éstas han sido emitidas con carácter general, sin tener en cuenta los objetivos específicos de inversión, la situación financiera o las necesidades particulares de cada persona. En ningún caso Hugo Ferrer, ni GPM SV, empresa de servicios de inversión a la que represento como agente vinculado, sus administradores, empleados y personal autorizado serán responsables de cualquier tipo de perjuicio que pueda proceder, directa o indirectamente, del uso de la información contenida en este documento. La información de este informe no puede ser distribuida y copiada sin autorización del autor. Cerramos el mes de enero con una apreciación del +1,20% en las cuentas gestionadas que siguen el modelo de inversión «All Seasons Momentum», teniendo la cuenta de referencia U58****** un saldo de 71.473 €, o un -28,53% desde el inicio en abril de 2021. Recuerdo a mis clientes, para evitar confusión con las cifras de este informe, que su rentabilidad real depende del momento de entrada en la estrategia. Enero fue un mes positivo en los mercados, que consiguieron darle la vuelta a las importantes caídas del mes de diciembre. Lo más llamativo es que en esta ocasión las mayores apreciaciones no vinieron de sectores más industriales, financieros, defensivos y/o “value”, sino que la gran sorpresa lo dieron los sectores cíclicos, como el sector del consumo discrecional que repuntó un +15,13% o el Nasdaq 100 que repuntó un +10,62%, cuando el más “value” índice Dow Jones Industrials, repuntó un mucho más moderado +2,83%. Nuestra estrategia, que en enero estaba posicionada un 50% en renta variable principalmente de sectores “value” y en un 20% en oro, logró apreciarse un +1,20%. A pesar del buen comportamiento del mercado general en enero, nuestra estrategia apenas ha cambiado al entrar en febrero. Si bien salimos del sector de los suministros públicos o utilities (XLU) y entramos en el de los materiales básicos (XLB), la exposición general es la misma que en la del mes de enero, un 50% en renta variable, un 20% en Oro y un 30% en efectivo, que yo definiría como una exposición cauta sobre la renta variable. Mi perspectiva sobre el mercado para los siguientes meses, trimestres y, con un poco de suerte años, sigue siendo alcista, ya que por un lado la inflación interanual sigue moderándose, el cual en mi opinión es el principal factor que influye en los mercados cuando se está en un ciclo inflacionario. Además, al igual que expliqué en el informe del mes pasado, hay diferentes medidas de amplitud de mercado, es decir, de indicadores que reflejan lo que está haciendo la mayoría de sectores y acciones, que se han activado positivamente. El último ejemplo de este tipo de indicadores es la media de 20 sesiones (1 mes) del ratio de acciones que suben con respecto al número de acciones que bajan en la bolsa de Nueva York, y que dio señal positiva a finales de enero. En el siguiente gráfico observamos el mismo indicador y su contexto de mercado pero en un mayor plazo, donde se pueden observar todas las señales de los últimos 25 años. Ningún indicador es perfecto, pero sin duda este es de los mejores indicadores que se pueden encontrar, ya que refleja algo que típicamente ocurre al comienzo de los mercados alcistas principales y secundarios: una fuerza muy alcista sostenida durante al menos un mes, algo que es tan infrecuente como el número de señales que se pueden observar en dicho gráfico. Desde mi punto de vista, el observar que la amplitud de mercado se ha vuelto positiva, a la vez que la inflación sigue moderándose, lo que para mí es el principal factor macro actual, me hace pensar que efectivamente estamos entrando en un nuevo mercado alcista, sea cual sea la duración que vaya a tener, algo que nunca se puede saber de antemano. Pero, aparte de todo ello, resulta que el sentimiento de mercado también se encuentra en niveles qué típicamente corresponden al comienzo de nuevos mercados alcistas. Por ejemplo, en la famosa encuesta a los gestores globales que realiza Bank of America cada mes, en el otoño pasado se alcanzó el punto más alto de pesimismo de toda la serie histórica que comienza hace dos décadas. La suma de las expectativas de crecimiento junto con las exposiciones de efectivo y acciones que mantienen estos gestores, muestra el punto de mayor cautela de toda la historia de esta encuesta. U observando la confianza de los consejeros delegados de las empresas estadounidenses, vemos que su grado de pesimismo ha vuelto a mínimos que históricamente son típico de zona cercana a mínimos bursátiles. De hecho, los estrategas de Wall Street, han comenzado el año con una postura de consenso (media) bajista sobre la bolsa, algo que no había ocurrido nunca en la encuesta que a éstos estrategas de inversión realiza Bloomberg. Y, por si fuera poco, los consumidores estadounidenses, según la encuesta de la Universidad de Michigan (una serie que comenzó en 2002 y tuvo una interrupción algunos meses de 2003), asignan una de las probabilidades más bajas de toda la serie a la posibilidad de que el mercado de valores se aprecie en los próximos doce meses. En mi opinión, objetivamente existe el pesimismo típico del comienzo de los mercados alcistas, los cuales suelen nacer en medio de un profundo pesimismo y escepticismo. Reconozco que a mí también me resulta extraño que el mercado bajista no tenga más desarrollo, pero en mi análisis me debo a los elementos que creo que han de considerarse en cada momento. Y, ahora, la macro según la inflación, el comportamiento del mercado y el sentimiento visto desde múltiples ángulos, me dicen que lo más probable es un desarrollo alcista del mercado de acciones. Si esto es así, veremos que en los próximos pocos meses nuestra estrategia irá aumentando la exposición a más y más sectores bursátiles, saliendo de la actual posición de semi-cautela, a una que abrace una mayor exposición al mercado. Este documento ha sido elaborado por Hugo Ferrer. con fines meramente informativos, no pudiendo considerarse bajo ninguna circunstancia como una oferta o recomendación de inversión. La información ha sido recopilada por Hugo Ferrer de fuentes consideradas como fiables. No obstante, aunque se han tomado las medidas razonables para asegurarse de que la información sea correcta, GPM no garantiza que sea exacta, completa o actualizada. En el caso de que hubiese opiniones, éstas han sido emitidas con carácter general, sin tener en cuenta los objetivos específicos de inversión, la situación financiera o las necesidades particulares de cada persona. En ningún caso Hugo Ferrer, ni GPM SV, empresa de servicios de inversión a la que represento como agente vinculado, sus administradores, empleados y personal autorizado serán responsables de cualquier tipo de perjuicio que pueda proceder, directa o indirectamente, del uso de la información contenida en este documento. La información de este informe no puede ser distribuida y copiada sin autorización del autor. Cerramos el mes de noviembre con una depreciación del -3,39% en las cuentas gestionadas que siguen el modelo de inversión «All Seasons Momentum», teniendo la cuenta de referencia U58****** un saldo de 70.627 €, o un -29,38% desde el inicio en abril de 2021. Recuerdo a mis clientes, para evitar confusión con las cifras de este informe, que su rentabilidad real depende del momento de entrada en la estrategia. Diciembre ha sido un mes duro en los mercados, con índices como el S&P 500 declinando un -5,90% o el Nasdaq 100 declinando un -9,06 %. A pesar de que mantuvimos una exposición del 80% a renta variable en diciembre, no declinamos tanto como los índices ya que la diversificación por sectores permitió sufrir una pérdida más reducida. No obstante, nuestras reglas es invertir en lo que presenta momentum positivo y desinvertir de aquello que ha perdido momentum, por eso comenzamos el mes de enero con una exposición más cauta en bolsa, con un 50%, pero también entramos con una nueva posición en Oro, con un peso total en cartera del 20%. Tras el parón (liquidez total) desde el 1 de septiembre hasta el 30 de octubre pasados por la falta absoluta de momentum en los mercados, parece que los mercados están mostrando nuevas esperanzas de que el momentum vuelva. El mes pasado de diciembre no ha sido un signo positivo, pero mi opinión es la misma de entonces: hay altas probabilidades de que esté naciendo un nuevo mercado alcista en la renta variable. De hecho, parece que en muchos países ya es así. En los momentos en los que escribo este informe, tenemos índices europeos y asiáticos mostrando importantes subidas en “V”, un patrón que típicamente se da al comienzo de los mercados alcistas. En el caso de la renta variable estadounidense y donde invertimos, hay una gran dispersión, teniendo índices como el Dow Jones Industriales mostrando fortaleza, mientras que otros como el Nasdaq están sufriendo mucho y lo único que han logrado es aparentemente formar un suelo sin subir significativamente. El S&P 500 se encontraría a mitad de camino de ambos. Esta situación me recuerda un poco a 2016 pero a la inversa. En aquella ocasión la bolsa americana subió con fuerza pero la europea se quedó rezagada, en un lateral de varios meses antes de que finalmente repuntara con algo de alegría. A veces suben más unos índices y a veces otros, pero finalmente todos convergen de una manera u otra a lo largo de los trimestres. En el caso actual se debe a que en un entorno de mayores tipos de interés, las empresas industriales y financieras lo hacen mejor que las tecnológicas, las cuáles sufren más porque a mayores tipos se le descuentan menores valoraciones. Es decir, no hay nada raro en lo que está ocurriendo, nada no conocido y nada tenga que ver con que unas economías se encuentren en mejor o peor situación. Simplemente en Europa hay más empresas industriales y financieras y en Estados Unidos hay más tecnológicas. Por lo demás, nuestro esquema sigue siendo el mismo: en los ciclos inflacionarios como el actual, las bolsas tienden a recuperarse una vez que la inflación interanual comienza a desacelerarse. En diciembre la inflación volvió a descender en EEUU hasta el 6,42% interanual, desde el 7,11% del mes previo. Por ello, teniendo en cuenta que en los ciclos inflacionarios una mejora de la inflación es un fuerte factor alcista, mi opinión es alcista en estos momentos. En informes pasados he hablado de cómo se han activado algunas señales de “amplitud de mercado” que confirman que las probabilidades son al alza desde aquí. Curiosamente, ayer mismo (12 de enero) se dio otra señal de amplitud en el mercado americano de un indicador que pocas veces se activa. Se trata del llamado “breakaway momentum” desarrollado por Walter Deemer y qué básicamente se centra en la media de 10 sesiones del ratio de avances Vs. retrocesos en la bolsa estadounidense. La siguiente tabla refleja todas las señales producidas desde la II Guerra Mundial. Y el siguiente gráfico muestra todas las señales habidas desde entonces a excepción de la actual: Y, finalmente, en esta tabla, vemos la rentabilidades por periodos desde cada una de esas señales. A doce meses, en todos los casos menos en uno, la lectura fue positiva con una rentabilidad media del 19,8%. ¿Ocurrirá de nuevo en esta ocasión? Eso no se puede saber, pero sí tengo claro que tanto las probabilidades macro como las técnicas apuntan al alza. Por otro lado, en enero hemos tomado una nueva posición en el Oro. Desde mi punto de vista las probabilidades también son alcistas en el metal dorado ya que, en las últimas décadas, desde que se aproxima la fecha en la que la Reserva Federal va a dejar de subir tipos, el Oro empieza a subir. Luego, cuando por fin se dejan de subir tipos y, ya no digamos, bajarlos, el Oro tiende a seguir subiendo. La líneas verticales rosa, reflejan los momentos en los que los tipos de interés de la FED comenzaron a descender. ¿Por qué ocurre esto? Por una razón muy sencilla. El Oro no es un activo que responda a la “inflación de la calle”, sino que responde a los tipos de interés reales (tipos de interés a largo plazo menos expectativas de inflación a largo plazo). Cuando la FED ha subido los tipos, los tipos de interés reales se encuentran bastante restrictivos y que esa FED vaya a dejar de subir tipos, alimenta las expectativas de que esos tipos reales serán más bajos y por tanto el Oro empieza a subir poniendo precio a esa potencial realidad. Este momento, enero de 2023 y volviendo a la renta variable, es el típìco momento en el que me digo a mi mismo: “Hugo, el futuro nadie lo conoce y todo puede ocurrir de forma diferente, pero si las mismas señales que hay en la actualidad se repitieran 100 veces, 100 veces que sería alcista”. Y eso es lo que pienso. Ahora, el momentum nos irá mostrando el camino. Este documento ha sido elaborado por Hugo Ferrer. con fines meramente informativos, no pudiendo considerarse bajo ninguna circunstancia como una oferta o recomendación de inversión. La información ha sido recopilada por Hugo Ferrer de fuentes consideradas como fiables. No obstante, aunque se han tomado las medidas razonables para asegurarse de que la información sea correcta, GPM no garantiza que sea exacta, completa o actualizada. En el caso de que hubiese opiniones, éstas han sido emitidas con carácter general, sin tener en cuenta los objetivos específicos de inversión, la situación financiera o las necesidades particulares de cada persona. En ningún caso Hugo Ferrer, ni GPM SV, empresa de servicios de inversión a la que represento como agente vinculado, sus administradores, empleados y personal autorizado serán responsables de cualquier tipo de perjuicio que pueda proceder, directa o indirectamente, del uso de la información contenida en este documento. La información de este informe no puede ser distribuida y copiada sin autorización del autor. |
Hugo Ferrer Gestor en GPM Profesor Experto Bolsa Universidad de Alicante y del Máster en Economía Bancaria de la Universidad de Sevilla. Autor libro "El Inversor Global: inversión y especulación siguiendo las fuerzas económicas que dirigen el mercado de acciones". Archivo
Octubre 2023
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